“El jardín de niños”
Por fin el ansiado día llego, el primero en levantarse ese día fue namy, situación que no había sucedido desde el 6 de enero (día de los santos reyes) apuro a sus padres quienes habían pedido permiso en su trabajo para no perderse tan memorable día. Desayuno y se baño rápidamente para después iniciar una carrera de un lado al otro de la casa revisando que no le faltara nada o se le hiciera tarde a pesar de que faltaban casi tres horas para que el jardín de niños abriera, aquello era único, no se si alguno de ustedes que amablemente me leen recuerde la sensación de la mañana del primer día de escuela es como respirar algo nuevo, se puede comparar como los instantes de sorpresa antes de destapar un regalo en navidad, aquella familia lo estaba disfrutando realmente, por sus mentes nunca paso las idea de que aquel cuento de hadas se podría convertir en una historia de terror.
Salieron de casa con videograbadora en mano, había que registrar el histórico suceso, por un segundo pensaron que tal vez eso era exagerar pero se sintieron mejor al observar en la calle que no eran los únicos, muchos otros padres en la misma situación tomaban fotos y grababan a sus peques sin cuidarse de las banquetas o de los autos, todos estaban dispuestos a tener su video home que reproducirían orgullosos en cada reunión familiar.
El plantel en cuestión era el jardín de niños “cuitlahuac” zona 25, sector 10 san Rafael Coacalco estado de México. La entrada se retraso penosamente mientras adentro las maestras y directora corrían de un lado para otro, se podría suponer que preparando todo, casi una hora después de lo anunciado (9 de la mañana) los niños, la mayoría, ya no veían la hora de entrar a su primer escuela.
Por fin los portones de reja de metal grueso se abrieron y cual arca de Noé todos entraron anhelantes, los niños observaban el amplio patio y los dos edificios que se levantaban a cada lado del lote, no había indicaciones ni nada por el estilo así que todos padres y futuros alumnos quedaron expectantes en el patio central, minutos después la directora acompañada de un par de maestras con sus delantales coloridos propios de su trabajo se apersonaron con un micrófono.
La directora, mujer de unos cuarenta años con postura firme y lentes oscuros que poco podían dejar ver de su rostro, de manera casi mecánica y con el formalismo propio de un evento burocrático extendió la bienvenida, eso era normal y se esperaba, pero pronto el discurso tomo forma de pregón de abonero, durante casi treinta minutos la directora en cuestión solo hablo de la cuota, que si la cuota era voluntaria pero necesaria, que la secretaria no les daba recursos, que la SEP no daba materiales por lo cual la cuota era para comprarlos etc. Nunca dijo nada de indicaciones, recomendaciones o algo que tuviera que ver con los niños, parecía que para esa señora eso era lo menos importante, finalmente como amenaza velada advirtió que solo se daría una semana de plazo para entregar la cuota y la pregunta de todos los espectadores era ¿y si no la pago, que? Obviamente se supuso que no se les daría el material necesario a los niños que no realizaran el diezmo aquel, ¿eso era legal o justo? Esa pregunta se las dejo de tarea a cada uno de ustedes.
Sin más avisaron que las listas con los nombres de los niños estaban en la entrada de cada salón y donde encontraran su nombre esa seria su aula, la de namy era la primera del lado derecho hasta el fondo, entro presuroso, tanto que casi se le olivaban las bendiciones y besos de sus progenitores. El día de trabajo de apenas una hora con todo y diez minutos de recreo termino y a la salida todo eran sonrisas y gritos jubilosos, namy salió con sendos dibujos, su primer trabajo presumiendo aquellos tiernos trazos con sus padres, hasta ese momento todo parecía ir muy bien.
continua...“¿bullying o descuido?”
prof. Francisco Gonzalez Reyna.
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