Hace u nos momentos regrese de calle después de concluir mis actividades de este día, al observar el noticiero en la televisión escuche lo de siempre, Japón destrozado, Gadafi con sus locuras, lo de siempre, la verdad ninguna de esas noticias me llamaron la atención o siquiera me interesaron, estaba a punto de desviar la vista de la pantalla cuando una imagen me congelo la sangre, era ella, Elizabeth Taylor y un momento antes de que dieran la noticia lo sabia, la reina nos había dejado. Falleció a los 79 años en el hospital Cedars-Sinai Medical Center, en Los Ángeles (Estados Unidos), donde había sido internada en febrero de este año, aun que muchas veces anteriormente había estado en el hospital debido a un padecimiento crónico, estaba siendo tratada por una insuficiencia cardíaca mayor.
Taylor apareció en más de 50 películas, incluyendo "Cleopatra" (1963), en su momento el filme más caro de la historia y por el que muchos la recordamos con gran cariño.
Ganó dos Oscar por sus interpretaciones en "Butterfield 8" (o "Una mujer marcada", 1960) y "¿Quién le teme a Virginia Woolf?" (1966).
Taylor era considerada una de las mayores estrellas cinematográficas del siglo XX. La leyenda del cine Elizabeth Taylor murió este miércoles por la mañana mientras dormía, aparentemente no sufrió y ese es un pequeño consuelo para su familia y sus fans. Según pudo confirmar la BBC, no hay duda la mujer de los ojos bellamente inquietantes había partido.
Quiero recordarla vibrante, juguetona, cautivadora como en sus primeras películas, poderosa y orgullosa sobre aquella esfinge en Cleopatra, ya esta con su gran amigo Michael Jackson.
Ha muerto la reina, dios guarde a la reina, desde aquí con un nudo en la garganta,un sencillo homenaje a Elizabeth Taylor.
Francisco González Reyna.
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